Una buena estrategia de marketing omnicanal no puede entenderse sin tener en cuenta los resultados y analizar una serie de indicadores que nos pueden aportar los datos clave, tanto de nuestro cliente potencial como de su comportamiento hacia los productos o servicios que ofrecemos en nuestro negocio. Como veíamos en posts anteriores cuando hablamos de la tasa de carrito abandonado, dentro del marketing digital, sobre todo si nuestro negocio es totalmente online, debemos tener en cuenta diferentes resultados. En el post de hoy, hablamos de un indicador vital a la hora de analizar los resultados de nuestro comercio: la tasa de conversión.
¿Qué es la tasa de conversión?
Hablamos de tasa de conversión o conversión rate para referirnos a una de las métricas más importantes del marketing digital, en la que medimos el porcentaje del total de usuarios de una página web que llevan a cabo una serie de eventos o acciones marcadas previamente como objetivo. Por ejemplo, dentro de esas acciones deseadas podríamos encontrar el realizar una compra, rellenar un formulario de contacto, visitar ciertas páginas clave o suscribirse a la newsletter de nuestro comercio, entre otras.
Se trata de un indicador importante en el marketing digital ya que nos aporta información valiosa de cómo nuestro cliente se comporta en diferentes puntos del proceso de navegación y posible compra. Estos datos, a su vez, nos podrán ayudar a mejorar nuestras estrategias y optimizar la navegabilidad de la página teniendo en cuentas las acciones que realizan los usuarios que entran en ella.
¿Cómo calcular la tasa de conversión?
Para conocer la tasa de conversión en un ecommerce tan solo debemos seguir una sencilla fórmula. Lo primero de todo será establecer el objetivo principal que queremos medir, por ejemplo, número de compras finalizadas con éxito.
En este caso, deberíamos dividir el número de usuarios únicos que han realizado compras en un periodo de tiempo concreto entre el número total de visitantes que ha recibido una página web en ese mismo periodo. Una vez tengamos el resultado, tan solo tenemos que multiplicarlo por 100 para obtener el dato en porcentaje. Un ejemplo de fórmula de tasa de conversión podría ser el siguiente:
Tasa de Conversión (%) =(10.000/5) × 100=5%
Factores que pueden afectar a la tasa de conversión
Son muchos los factores que pueden afectar de manera positiva y negativa a la tasa de conversión. Algunos de los más notables podrían ser:
Navegación y experiencia de usuario:
Una página web con tiempos de carga cortos, limpieza y claridad del contenido, y facilidad de navegación nos puede ayudar a la hora de convertir a un mayor número de usuarios. Por el contrario, una página desordenada y muy lenta, hará que el cliente no permanezca mucho tiempo en la web y abandone antes de convertir.
Seguridad
Una página web clara que siga los protocolos de seguridad y encriptación de los datos, aportará una mayor confianza al usuario a la hora de realizar sus compras, por lo tanto, la probabilidad de conversión aumenta.
Calidad del contenido
Si nuestro ecommerce cuenta con imágenes nítidas, descripciones completas y opiniones de nuestros productos y servicios, la posibilidad de obtener una compra se multiplica.
Call to action
Además de ofrecer un contenido de calidad, debemos añadir ciertas llamadas a la acción que lleven al usuario a completar los objetivos que hemos marcado previamente, como puede ser la compra de nuestros productos.
Diseño responsive
Muchas de las compras que realizamos en nuestro día a día se completan a través de dispositivos móviles, por lo que es vital que nuestro ecommerce ofrezca un diseño responsive en el que todos los elementos se vean de manera optimizada en cualquier dispositivo.
Promociones
En ciertas temporadas (Black Friday, rebajas, Navidad…) las compras se disparan por lo que es previsible que en estos periodos la tasa de conversión aumente con respecto a otros.
Estrategias para mejorar la tasa de conversión
Si nuestro comercio online muestra una tasa de conversión muy baja, debemos analizar los resultados paso a paso y optimizar los puntos que veíamos anteriormente. Además, estudiar los pasos de nuestros usuarios en la web (páginas visitadas, tiempo de visita medio…) nos puede dar pistas de cuáles son los aspectos que deberíamos mejorar en nuestra tienda.
Por ejemplo, si un usuario realiza todo el proceso de compra, pero no llega a finalizarla, podría intuirse que el proceso es poco claro en su etapa final, puede faltar un call to action claro o la navegabilidad de la página no es correcta.
Otro ejemplo claro sería analizar los tiempos de carga de nuestra web. Si para visitar la página de un producto el tiempo de espera es muy elevado, lo más probable es que el usuario salga de la web antes de que termine de cargar, por lo que es vital que reduzcamos tiempos de carga optimizando imágenes y vídeos.
En este sentido, realizar pruebas A/B es muy importante, nos ayudará a entender qué opciones de contenido o promociones, entre otros aspectos, podrían funcionar mejor entre nuestros clientes potenciales, mejorando de esta forma la tasa de conversión.
Herramientas de medición
Hoy en día, hay numerosas herramientas que pueden ayudarte no solo a medir la tasa de conversión de tu ecommerce sino a optimizarla y sacar el máximo partido a todas las métricas. Algunas de las más utilizadas son las siguientes:
- Google Analytics. Se trata de la herramienta gratuita más utilizada, nos permite conocer multitud de métricas relacionadas con los resultados de nuestra web: tasa de conversión de diferentes eventos, número de visitas totales y visitantes únicos, promedio de tiempo que nuestros clientes navegan en la web, perfilado de nuestros usuarios…
- Google Optimize: También de Google y gratuita, esta herramienta está enfocada, sobre todo, en la realización de pruebas A/B con el objetivo de optimizar la experiencia del usuario y mejorar la tasa de conversión.
- Crazy Egg. Nos ofrece mapas de calor, grabaciones de sesiones y otras visualizaciones para analizar la interacción de los usuarios con nuestra web, lo que nos puede ayudar a optimizar la experiencia.
- Hotjar. Funciona de forma similar a Crazy Egg, ofreciendo mapas de calor y grabaciones de las sesiones de nuestros usuarios.
En resumen, conocer la tasa de conversión de nuestro negocio online nos ayudará a obtener una visión más amplia del comportamiento de nuestros usuarios, permitiéndonos poner el foco en los posibles errores de nuestra web para optimizarlos y mejorar las experiencias de compra.
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